“DULCE MADRE, MADRE MÍA”. ..casavi..!

 En silencio, sin alarde,

Al comienzo del día,

La figura de mi madre,

Su oración nos repetía.

Amorosa su presencia,

Siempre firme exigía,

Nos formaba y educaba,

A ser buenos insistía.

Respeta a tus mayores,

Y jamás digas mentiras,

Insistía en los valores,

Dulce madre, madre mía.

Persistente en su misión,

Con disciplina enseñaba,

Sin inculcarnos temor,

Las caídas afrontaba.

Amor y temor a Dios,

Con respeto a tu hermano,

Nunca niegues tu amor,

Al que te pide una mano.

Eres nada, Dios es todo,

Con las basuras del mundo,

Jamás te llenes de lodo,

Y nunca dejes tu rumbo.

Tener mucho, nada importa,

Darlo todo, siempre es bueno,

Nos regalaba su ejemplo,

Siempre alegre, siempre ameno.

Hermosos y firmes regaños,

En el forjar nuestra vida,

Pasan días, corren años,

Y su presencia hago mía.

Muchas cosas, gano el tiempo,

Férrea y fuerte, fue su guía,

El más grande testamento,

Que hoy comparto, Madre mía.

FRANCISCO CASAVI.

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